Como transportistas de leche de vaca estamos más que familiarizados con sus características y conservación. Del mismo modo somos conscientes de la popularización de las bebidas vegetales en los últimos años y que se tienden a comparar muchas veces con la leche de vaca.
Por este motivo, en este post nos vamos a centrar en los puntos diferentes y en común entre ambas bebidas. Pasando por aspectos como la obtención y conservación a los valores nutricionales de cada una.
¿Cómo se obtiene la leche de vaca y las bebidas vegetales?
En cuanto al modo de obtención de la leche de vacas albergamos pocas dudas. Las glándulas mamarias de las vacas transforman los nutrientes en leche y de ahí se almacena en los ubres. En las salas de ordeño se extrae la leche de las vacas dos veces al día, en horarios regulares y va a pasar a un tanque refrigerado hasta que es transportada en las cisternas alimentarias para su posterior tratamiento antes de distribuirla para la venta.
En todo este proceso no podemos olvidarnos de la importancia de mantener la cadena de frío para garantizar un nivel de conservación óptimo.
La cantidad de leche que puede producir una vaca al día depende de factores como la edad, la raza, su salud… Pero en términos generales la media es de unos 20 litros al día.
Por otra parte, la leche sin lactosa, una alternativa para personas con intolerancia se obtiene de la leche normal rompiendo el enlace de la lactosa. Para ello se puede pasar por un soporte que tiene la enzima inmovilizada o añadirle lactasa.
En cambio, las bebidas vegetales tienen un modo de obtención completamente diferente. Para su obtención se mezcla agua con frutos secos, cereales o semillas. Según los ingredientes y el resultado deseado el proceso puede variar, pero por lo general se hidratan con agua durante un tiempo para que liberen sus nutrientes o se cuecen durante unas horas. El siguiente paso es triturarlos para posteriormente realizar el filtrado y endulzado.
Principales tipos de bebidas vegetales
Las leches vegetales se caracterizan por su amplia variedad. A ver cuántos tipos de bebidas vegetales conoces y has probado:
- La bebida de avena: es una de las más clásicas y fáciles de elaborar.
- La bebida de almendras: se caracteriza por su toque dulce y a veces puede llevar más azúcar del recomendado. La bebida de avellanas es una alternativa con propiedades semejantes.
- La bebida de soja: es popular por su versatilidad y sus cantidades de proteína. Es la bebida vegetal más parecida a la leche de vaca.
- La bebida de arroz: tiene un sabor neutro y menos nutrientes que las otras variantes.
- La bebida de alpiste: es más exótica y se considera un superalimento.
- La bebida de quinoa: es refrescante y nutritiva, pero su precio suele ser más elevado que las demás.
La lista sigue, se puede hacer bebida vegetal con prácticamente cualquier fruto seco, cereal o semilla. ¡En la variedad está el gusto!
Comparativa de valores nutricionales
En cuanto a los valores nutricionales de la leche de vaca y de las bebidas vegetales, está la tendencia a pensar que las bebidas vegetales tienen un aporte nutricional mucho más pobre.
Lo que debemos hacer en este ámbito es revisar los ingredientes y la composición de cada bebida. Ya que dependiendo de cómo se ha obtenido y de los añadidos que tiene, podrá tener una mayor o menor cantidad de calorías y azúcares, así como de proteínas y vitaminas.
Muchas bebidas vegetales presentan altos niveles de azúcar. Debemos fijarnos en todos los ingredientes que se le añaden en la preparación. Las marcas ecológicas siguen procedimientos más naturales, con menos añadidos y sus valores nutricionales suelen ser mejores.
La leche de vaca suele destacar especialmente por nutrientes como el calcio. En este caso, también debemos revisar los ingredientes y la tabla nutricional. Además, hay que tener en cuenta que las leches semidesnatadas y desnatadas tienen menos calorías y grasas que las enteras, pero que también pierden otros nutrientes en este proceso. La leche semidesnatada es la más recomendada de las tres porque consigue un mejor equilibrio.
Por otra parte, mientras que toda la leche de vaca es sin gluten, algunas bebidas vegetales pueden tenerlo, dependiendo de sus ingredientes. En caso de celiaquía se debe comprobar que sean bebidas vegetales sin gluten.
Conservación de la leche de vaca y de las bebidas vegetales
Teniendo en cuenta el modo de obtención de cada bebida podemos entender que la leche de vaca es más delicada y es especialmente importante cuidar la cadena de frío. Se debe mantener refrigerada en todo momento, especialmente hasta que es pasteurizada.
Las bebidas vegetales también deben mantenerse refrigeradas hasta el momento del consumo, ya que a temperatura ambiente se activan sus microorganismos.
En cuanto al plazo de consumo una vez abiertas, se recomienda no exceder los 3 días para la leche de vaca y para las bebidas vegetales. A partir de ese plazo se empiezan a oxidar y a perder progresivamente sus propiedades.
Después de hacer esta comparación entre la leche de vaca y las bebidas vegetales solo nos queda resaltar que estamos hablando de conceptos completamente diferentes. Su método de obtención, composición y valores nutricionales son diferentes. Así como su sabor. Además, las leches vegetales son una opción muy interesante para vegetarianos, veganos o intolerancias como la lactosa.